El café es la semilla del fruto de un árbol y cuenta con más de 125 especies. Tres de ellas son importantes desde el punto de vista económico: Coffea Arabica (café arábica), Coffea Canephora (robusta) y Coffea Liberica.
El primer café cultivado fue el Arabica. Recientemente se cultiva en Arabia, pero hoy en día se cultiva principalmente en América Latina. El Robusta, que se considera originario de África Oriental y el Congo, se cultiva en África y Madagascar. Estas dos especies también se cultivan en Asia.
Normalmente, el cafeto alcanza una altura de entre 8 y 10 metros (el arábica, entre 5 y 6 m, y el robusta, entre 10 y 12 m), pero debido a las técnicas de cultivo, se suele dejar crecer hasta 2 o 3 metros. Para su cultivo son necesarias diversas condiciones, como la zona tropical, el suelo volcánico, la humedad ambiental media, etc.
Los árboles florecen con flores blancas generalmente poco después de la lluvia. Estas flores viven solo unos días y el fruto sale del centro de las flores. Este fruto, también llamado cereza de café, tiene una forma redondeada de 1,5 cm y es de color verde al principio. Se vuelve rojo cuando madura y es este fruto rojo el que se utiliza. El pericarpio grueso del fruto envuelve el grano de café y suele contener dos granos verdes.